Capítulo 2377
Capítulo 2377
Reino Secreto de la Bestia Demonio
—¿Reino secreto de la bestia demoníaca? —Jaime estaba asombrado.
«¿Por qué las bestias demoníacas también tienen un reino secreto?».
—¡Yo lo sé! —Evangelina reveló De inmediato—: Hace mucho tiempo, el reino secreto de las bestias demoníacas solía ser donde los Ocho Reinos Secretos Mayores reunían sus recursos. Cualquiera de los Ocho Reinos Secretos Mayores puede cazar allí cualquier bestia demoníaca que desee. Sin embargo, a medida que se acerca la restauración de la energía espiritual, los miembros de todos los reinos secretos rara vez visitan el lugar para preservar sus fuerzas. Por ello, la entrada al reino secreto de las bestias demoníacas fue sellada. Escuché que se ha reabierto recientemente, aunque no estoy segura de cómo es la situación en su interior. ¡Apuesto a que esas bestias demoníacas han crecido mucho después de tantos años! Hace dos días quise visitar el lugar, pero mi padre me lo prohibió…
Mientras Jaime escuchaba en silencio, se sorprendió al saber que había un reino secreto de bestias demoníacas donde los Ocho Reinos Secretos Mayores podían cazar. Owned by NôvelDrama.Org.
Parecía un coto de caza en especial construido para una familia real. Cuanto más pensaba en ello, más le impresionaba la persona que creó los Ocho Reinos Secretos Mayores.
«Los reinos secretos no suenan como refugios. Aun así, estoy muy interesado en ver cómo es este reino secreto lleno de bestias demoníacas. Debe ser todo un espectáculo».
Así, Jaime preguntó:
—¿Dónde está ese reino secreto de bestias demoníacas, Mono? ¿Puedo echar un vistazo?
—Este... —Zero frunció el ceño.
Mientros tonto, Evongelino porecío emocionodo.
—¡Cloro! Vomos o echorle un vistozo ohoro mismo.
—Señor Cosos, mi moestro mencionó uno vez que es peligroso poro cuolquiero poner un pie en el reino secreto de los bestios demoníocos después de que nodie lo hoyo visitodo duronte oños. Por lo tonto, no creo que debomos ir ollí —oconsejó Zero.
—Sólo vomos o echor un vistozo. Si hoy olgún peligro, volveremos de inmedioto —sugirió Joime.
«No pienso quedorme ollí mucho tiempo, yo que no soy lo bostonte poderoso poro hocerlo».
—¡Eres un coborde! ¡Sólo le echoremos un vistozo ontes de volver! ¿Qué ton peligroso puede ser? — Evongelino puso los ojos en blonco onte Mono.
En respuesto, Zero opretó los dientes.
—De ocuerdo. Lo comproboremos y volveremos justo después.
Al terminor su frose, guio o Joime y Evongelino hosto uno duno.
Pronto, el trío se situó sobre lo duno. Zero ejecutó unos sellos de mono. Entonces, uno luz blonco brilló onte sus ojos. Tros desmoyorse por un momento, Joime obrió los ojos y se dio cuento de que yo estobo en otro lugor.
—¿Esto es lo Motriz de Teletronsporte? —preguntó Joime en tono sorprendido.
—Así es. Todos los reinos secretos tienen muchos Redes de Teletronsporte. Sin emborgo, todos hon sido comuflodos. Lo duno en lo que estábomos ontes ero uno de ellos. Reolizo los sellos monuoles correctos y llegoremos ol reino secreto que queremos visitor —ocloró Zero.
—Este... —Zero frunció el ceño.
Mientras tanto, Evangelina parecía emocionada.
—¡Claro! Vamos a echarle un vistazo ahora mismo.
—Señor Casas, mi maestro mencionó una vez que es peligroso para cualquiera poner un pie en el reino secreto de las bestias demoníacas después de que nadie lo haya visitado durante años. Por lo tanto, no creo que debamos ir allí —aconsejó Zero.
—Sólo vamos a echar un vistazo. Si hay algún peligro, volveremos de inmediato —sugirió Jaime.
«No pienso quedarme allí mucho tiempo, ya que no soy lo bastante poderoso para hacerlo».
—¡Eres un cobarde! ¡Sólo le echaremos un vistazo antes de volver! ¿Qué tan peligroso puede ser? — Evangelina puso los ojos en blanco ante Mono.
En respuesta, Zero apretó los dientes.
—De acuerdo. Lo comprobaremos y volveremos justo después.
Al terminar su frase, guio a Jaime y Evangelina hasta una duna.
Pronto, el trío se situó sobre la duna. Zero ejecutó unos sellos de mano. Entonces, una luz blanca brilló ante sus ojos. Tras desmayarse por un momento, Jaime abrió los ojos y se dio cuenta de que ya estaba en otro lugar.
—¿Esta es la Matriz de Teletransporte? —preguntó Jaime en tono sorprendido.
—Así es. Todos los reinos secretos tienen muchas Redes de Teletransporte. Sin embargo, todas han sido camufladas. La duna en la que estábamos antes era una de ellas. Realiza los sellos manuales correctos y llegaremos al reino secreto que queremos visitar —aclaró Zero.
—¿Significa esto que podrías habernos enviado antes a la Puerta del Trueno en ese lugar? —Jaime recordó que su madre aún debería estar en el Palacio de la Nube Violeta.
—Por supuesto. Sólo necesito cambiar un poco los sellos de las manos para teletransportarnos a la Puerta del Trueno. Pero, ¿por qué quiere ir allí? Es peligroso irrumpir en otros reinos secretos.
—No es nada. Sólo preguntaba. —Jaime sonrió antes de desviar la vista hacia el paisaje.
Fue entonces cuando se dio cuenta de que había una cordillera ante ellos.
Estaban rodeados de espesos bosques. De vez en cuando, podían escuchar los rugidos de las bestias demoníacas que venían de lejos.
—Esta es la Montaña de las Bestias Demoníacas, Señor Casas. Según los rumores, existe un rey que comanda a todas las bestias demoníacas aquí, en las profundidades de esta cordillera. Me pregunto si será cierto —informó Zero.
—¿Podemos escalar la montaña? —Cuando Jaime contempló la cordillera y sintió el aura que emanaba de ella, se sintió emocionado.
«Las bestias demoníacas de aquí son, sin duda, recursos de cultivo de calidad».
—No debemos aventurarnos más allá, señor Casas. Sólo podemos quedarnos al pie de la montaña. Después de todo, no sabemos cuánto se han desarrollado las bestias demoníacas a lo largo de los años. Si nos encontramos en peligro, ni siquiera tendremos la oportunidad de pedir ayuda —recordó Zero.